viernes, 18 de abril de 2025

Cómo crear un Wargame en Solitario: Temática

 Continuamos con esta serie de artículos sobre cómo crear tu propio wargame en solitario y en esta entrada vamos a desarrollar la temática del juego.

En el hobby de los wargames, podemos encontrarnos juegos de todo tipo, los que representan grandes batallas épicas, escaramuzas de unas pocas unidades o incluso juegos en los que manejamos un solo personaje. Los hay modo competitivo 1 contra 1, multijugador, solitarios o cooperativos. 

Sin embargo, lo que finalmente suele llamarnos la atención y lo que nos hace decantarnos por un sistema u otro suele ser la temática, el trasfondo o como se dice actualmente, "el lore". Y aquí tenemos también un margen tan amplio como nuestra imaginación.


Una primera división que me gusta hacer es la que se suele utilizar en muchas webs, y también en las tiendas online del hobby, que dividen los juegos y miniaturas en tres grandes grupos:

- Fantasía: Juegos basados sobre todo en el mundo creado por Tolkien y otros ambientes medievales de fantasía.

- Histórico: Desde juegos de batallas antiguas como Hail Cesar o Impetus, a juegos de épocas más modernas como todos aquellos centrados en la primera y segunda guerra mundial.

- Ciencia Ficción (Sci fi o futurista). Juegos que se centran en un futuro lejano con naves espaciales y armas avanzadas como Stargrave, Dead Zone o Rogue Planet.

Además siempre podemos combinar estos temas entre sí. Por ejemplo un juego de Mitología Griega podría considerarse un juego histórico de fantasía, ya que combina hechos, lugares y personajes históricos con todo el mundo fantástico de dioses y criaturas mitológicas. También podemos encontrar juegos históricos mezclados con ciencia ficción como en el caso de Stargate que nos lleva a un Egipto en el que se mezclan soldados militares con una raza avanzada en época de faraones.


Además, tenemos muchos subtipos o temáticas que tienen casi una entidad propia. Entre los que destaco con mayor importancia serían:

- Género Dungeon o de mazmorras.

- Temática Oscura o Grimdark.

- Juegos de terror u horror como aquellos basados en apocalipsis con zombis.

- Distopias como el género Steampunk o Ciberpunk.

Claro, estos tipos de temáticas o entornos son a veces demasiado genéricos y nos deja en el tintero muchos subgéneros que mezclan varios tipos. Por ejemplo el género Steampunk nos mezcla historia con fantasía y ciencia ficción. Así, podemos añadir estos subgéneros dando resultado a otra temática distinta. Por ejemplo si mezclamos los tipos principales con el género grimdark obtendríamos temáticas como las siguientes:

- Fantasía Grimdark como en los juegos 1490 Doom o  Forbidden Psalm.

- Histórico Grimdark como en A War Transformed, Silver Bayonet o Cohors Cthulhu.

- Sci Fi Grimdark como el universo de warhammer 40k, Necromunda o Horizon Wars: Zero Dark

Luego tenemos un montón de temáticas que quizás no se puedan incorporar a estos tipos pero que crean una gama de juegos por temática en sí mismos. Ejemplos claros de estos juegos serían los de temática post apocalíptica, los juegos de batallas entre robot gigantes o mechas o los juegos ambientados en el mundo de H.P. Lovecraft.

Los mitos de Cthulu son sin duda uno de los temas estrella en los wargames de terror

Otro factor a tener en cuenta al elegir la temática es inspirarnos en aquello que nos gusta, ya sea como referencia a un libro, a una película, a videojuegos o a otros juegos ya existentes. Por ejemplo si somos apasionados de las películas de samurais, podemos centrar nuestro proyecto en el lejano Japón como sucede en juegos como Ronin, Torii o Kensei. 

También es importante centrar los elementos que vamos buscando en nuestro juego con una temática que vaya acorde a él. Por ejemplo imaginemos que queremos crear o diseñar un juego en solitario en el que somos el piloto de una nave que va recorriendo distintos planetas saqueando antiguos tesoros de distintas civilizaciones mientras se enfrenta a otros cazatesoros o a los guardia interestelares. Siguiendo esta idea, nuestra temática va a tener que ser sin duda de Ciencia Ficción, aunque siempre podemos añadir toques de fantasía. Si por el contrario lo que queremos plasmar en nuestro reglamento es un grupo de enanos que vaga por las minas ocultas de las montañas en busca de el metal definitivo, quizás tengamos que desarrollarlo más como un juego de fantasía estilo Dungeon.

Un consejo que quiero daros es que una vez que tengáis clara la temática que os gusta y en la que queréis centrar vuestro juego, repaséis con calma todos los juegos existentes sobre esa temática si es que existen. Esto os permitirá haceros una idea de cómo otros autores representan ese ambiente o trasfondo en las reglas del juego. Además puede ser que encontremos algún sistema que nos guste y no conocíamos, y solo tengamos que aplicar ciertos cambios para adaptarlo a nuestra idea original.

Al final lo importante no siempre es la mecánica o motor del juego, sino que su trasfondo, su entorno y sus miniaturas nos gusten y nos hagan implicarnos en el juego, lo que llamamos "juego inmersivo". De hecho cuando un juego consigue por sus reglas y tiradas sacarnos de la temática, es que hemos fracasado como autores. 

En la siguiente entrada vamos a tratar el que sin duda es el punto clave a la hora de crear un wargame en solitario, el diseño de las reglas y el motor de juego.

Recordad, puedes jugar solo pero no estás solo.


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